El proceso de la saca del corcho
El corcho es el nombre que se da a la corteza protectora del tronco del alcornoque. El alcornoque es la única especie vegetal capaz de producir corcho de elevada calidad. Esta materia prima dio origen a una industria única en el mundo y vital para a subsistencia del Montado y de la economía portuguesa — ya que el corcho representa 2% de las exportaciones del país.
La saca del corcho se realiza en el Montado, en Alentejo. El Montado, un bosque de alcornoques, constituye el 23% del la cobertura forestal portuguesa. El Montado es, además, uno de los 35 santuarios globales de biodiversidad, en el que habitan más de 160 especies de aves, 24 especies de réptiles y anfibios, y 37 especies de mamíferos, entre ellos el lince ibérico. El Montado absorbe 14 millones de toneladas de CO₂ todos los años, impidiendo, de este modo, que se liberen a la atmósfera.
El alcornoque vive, en media, 200 años. Solo después de los primeros 25 años de esta larga y fructuosa vida empieza a producirse el corcho en el tronco del alcornoque. En la primera saca, llamada bornizo, se obtiene un corcho de estructura irregular y extremamente duro, de tal forma que es difícil trabajarlo. Este "corcho virgen" se utiliza, normalmente, en pavimentos y aislamientos, ya que no es suficientemente flexible para convertirlo en tapones.
Solo después del tercer año de saca, el corcho presenta propiedades adecuadas para la producción de tapones. Después de cada saca, el alcornoque tarda nueve gloriosos años en regenerarse y en brindarnos, una vez más, su corcho. Durante su vida útil, el alcornoque ocasionará, en media, 15 sacas de corcho.
A lo largo de este proceso, es absolutamente crucial que se tomen todas las precauciones necesarias para no dañar a los árboles. Si el alcornoque se daña, no podrá regenerarse y dejará de producir corcho. Por esta razón, la saca la realizan únicamente profesionales altamente cualificados. El proceso de saca del corcho se ejecuta en seis etapas:
Apertura: Se golpea el corcho en el sentido vertical a lo largo de grieta más profunda de la corteza. Al mismo tiempo, se tuerce el filo del hacha de modo a separar la pana de corcho del tronco.
Separación: El filo del hacha se introduce entre la pana y el entrecasco, seguido de un pequeño giro del hacha para concluir la separación.
Trazar: Se delimita con un corte horizontal la dimensión de la pana que se va a extraer.
Extracción: Se extrae la pana con el máximo cuidado para que no se rompa. Cuanto más grande sea la pana extraída, mayor será su valor comercial. Tras extraer la primera pana, se repite el proceso hasta que se haya retirado todo el corcho del tronco.
Remoción: Tras la extracción de las panas, algunos fragmentos de corcho permanecen junto a la base del tronco. De forma a retirar los posibles parásitos que existan en la cuña del alcornoque, el corchero deberá golpear la cuña con el ojo del hacha.
Marcado: Al final del proceso de saca del corcho, se marca cada uno de los árboles con los últimos dígitos del año en el que se realizó la extracción, de este modo será posible calcular el año en el que se podrá repetir el proceso.
Utilizamos todo el corcho que se extrae, sea a través del uso de las sobras para subproductos o en el reciclaje de productos de corcho ya usados.